Minerva López González
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PALENQUE. Palenque, Pueblo Mágico es uno de los más
importantes de Chiapas ampliamente reconocido por su riqueza cultural y
gastronómica.
Para este próximo, 1 y 2 de noviembre, se adornan las
tumbas con
flores, veladoras, papel picado, y la comida favorita del difunto,
entre los que se encuentran los dulces típicos como la calabaza, camote y yuca;
elotes hervidos acompañados de polvojuán, mezcla de chile crespo seco y
tostadas, todo molido con sal, entre otras.
Así mismos se disfruta del, atole de granillo, hecho a
base de maíz amarillo o blanco, canela, cal, azúcar y agua; Pozol, hecho de
cacao y maíz, y los tradicionales tamales en todas sus variaciones.
El primero de noviembre se acostumbra visitar el panteón
para limpiar las tumbas y adornarlas con hojas de árbol que se extienden por
todo el sepulcro formando una olorosa alfombra, rezan a sus muertos y comparten
con ellos los alimentos.
Por la tarde regresan a sus casas y colocan la ofrenda
familiar que consiste en pozol, frutas, tamales y guisados de carne de res,
además de velas y flores. El día 2 regresan por la mañana al panteón para
llevar ofrendas velas, flores y comida.
Palenque está lleno de magia, entre las tumbas más
antiguas podemos encontrar la de Capitán y Piloto Aviador Víctor Manuel Balboa
Oropeza, quien dejó de existir el febrero de año 1973; así como José Domingo Álvarez
Martínez quien partiera con el creador en 1958; o María Díaz quien dejó de
existir en septiembre del año 1969, como ellos una gran historia y leyendas se
hablan en el panteón de Palenque, y este próximo día de muertos serán
recordados.
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